Entrevista a Gerson Lodi-Ribeiro por JP Cifuentes Palma
Traducción con asistencia de Julio Maturana
Gerson Lodi-Ribeiro es un escritor brasileño de ciencia ficción que también escribe bajo los seudónimos de Daniel Alvarez y Carla Cristina Pereira. Obtuvo el Premio Argos en el 2012 a mejor novela por su libro El guardián de la memoria (São Paulo: Editora Draco, 2011), el Premio Especial Argos a la obra en su conjunto otorgado en el año 2012 en V Fantasticon y el Premio Argos el año 2018 a Mejor Novela por su libro Octopusgarden (São Paulo: Editora Draco, 2011). En diciembre de 2012 edita en Brasil la antología Solarpunk: Historias ecológicas y fantásticas en un mundo sostenible, por Editora Draco anunciando lo que sería un subgénero de la ciencia ficción especulativa al cual accedió a otorgar una entrevista para profundizar y dar a conocer el solarpunk.

Gerson Lodi-Ribeiro
1-. JP Cifuentes Palma: ¿Cómo fue tu primer acercamiento a la ciencia ficción?
Gerson Lodi-Ribeiro: En lo que respecta a la ciencia ficción, hasta donde sabemos, el primer abordaje global al tema solarpunk tuvo lugar en el ámbito de la antología Solarpunk: Historias ecológicas y fantásticas en un mundo sostenible, que organicé para Editoral Draco, lanzada en Brasil en diciembre de 2012. Esta antología ya tiene dos ediciones extranjeras: la norteamericana, traducida al inglés por Fábio Fernandes y publicada por World Weavers en 2018; e italiano, traducido a ese idioma del inglés por Maria Grazia Beltrami y publicado por Le Mezzelane Casa Editrice hace dos semanas, en junio de 2021.
2-. JPCP: ¿Qué es solarpunk y cómo creaste la antología?
GL-R: Bueno, de la propia etimología:
{solar} = En sentido amplio: energía solar; energía eólica; energía de las mareas; fusión controlada de hidrógeno, etc., es decir, energía limpia, renovable y barata disponible para todos.
{punk} = elementos de contracultura: Contestación a los grupos de poder representados por gobiernos y corporaciones corruptos que contaminan el medio ambiente, arruinan nuestra biosfera y se eximen de la responsabilidad del calentamiento global antropogénico.
Respecto a la génesis de Solarpunk: Historias ecológicas y fantásticas en un mundo sostenible en sí mismo, la antología surgió en el ámbito de un proyecto de triantología punk (una trilogía de antologías) realizado por Editora Draco y concebido para explorar los subgéneros punk de la ciencia ficción en portugués.
De esa forma, en 2010 lanzamos Vaporpunk: Relatos Steampunk publicados bajo las órdenes de Sus Majestades, la segunda antología steampunk en lengua portuguesa, que buscaba ambientar el retrofuturismo de las eras del Vapor como alternativas a los escenarios imperiales portugueses y brasileños.
Debido a que el vapor no era lo suficientemente sucio, en 2011 cambiamos los motores de vapor a motores de combustión interna y lanzamos Dieselpunk: Archivos confidenciales de una bella época, la primera antología del mundo en el subgénero dieselpunk.
Hartos de contaminar el planeta, en 2012 lanzamos Solarpunk: Historias ecológicas y fantásticas en un mundo sostenible, no solo es la primera antología del subgénero solarpunk a nivel mundial, sino también marca el inicio literario del movimiento cultural solarpunk y es la primera antología de literatura especulativa de habla portuguesa en ser traducida al inglés y ser publicada en los EE. UU. (y ahora también en Italia).

3-. JPCP: ¿Cómo se puede diferenciar el clima ficticio del solarpunk?
GL-R: En primer lugar, es necesario definir la ecoficción, también llamada ficción ecológica, ficción ambiental o ficción verde. La ecoficción es el supergénero literario cuyas narrativas de ficción abordan temas naturales (y no humanos) o ambientales (es decir, impactos humanos en la naturaleza). Una narrativa de ecoficción puede no constituir ficción especulativa (ciencia ficción + terror + fantasía). En la ecoficción, el medio ambiente y ecosistemas, reales o ficticios, se muestran de manera realista, de acuerdo con principios científicos y ecológicos.
El clima ficticio, la ficción climática o incluso la ficción sobre el cambio climático es el género literario cuyas narrativas abordan el cambio climático en general y el calentamiento global antropogénico en particular. En este sentido, la ficción climática puede verse como un subgénero de la ecoficción. Al igual que en la ecoficción, la narrativa de ficción climática puede no constituir literatura fantástica.
El Solarpunk es un subgénero de la ciencia ficción que, a diferencia del steampunk, adopta una postura ecofuturista en lugar de retrofuturista. Las narrativas solarpunk no son distópicas, sino utópicas, constituyendo ecotopías, con tramas que muestran un sesgo generalmente optimista y cuyas acciones se desarrollan en mundos ecológicamente correctos, con economías autosostenibles, alimentadas por fuentes de energía renovable. Este enfoque optimista distingue al solarpunk tanto del cyberpunk como del steampunk y de otros subgéneros punk de la ciencia ficción. Esta perspectiva optimista sobre solarpunk es una reacción al estado de ánimo pesimista predominante en muchas de las narrativas de ciencia ficción de actuales. Los futuros autosustentables y pacíficos concebidos por los autores de solarpunk muestran a la humanidad liberada de los fantasmas de la escasez, de la superpoblación, de las desigualdades económicas y sociales, de las extinciones masivas y las ecocatástrofes. A partir de la conceptualización anterior, se observa que algunas las narrativas solarpunk (pero no todas) pueden leerse como ficciones climáticas.
4-. JPCP: ¿Es posible una mirada optimista a la ciencia ficción dentro de una realidad pandémica?
GL-R: Es posible, sí. Sobre todo, en la realidad pandémica que aún hoy vivimos en América Latina. Porque, ahora más que nunca, es necesario mostrar a los lectores y al mundo que, más que lógico y plausible, es saludable concebir futuras civilizaciones humanas que no se vean atormentadas por la superpoblación; la miseria; la contaminación, los residuos y el calentamiento global. El desafío al que debe enfrentarse todo autor de solarpunk es elaborar su narrativa no en esa ingenua forma didáctica gernsbackiana, sino en forma de historias y novelas cuyas tramas incorporen estas ideas relevantes (fuentes de energía limpia y renovable, autosostenibilidad, etc.) en natural y divertido, incrustado en una trama original y convincente.
Como autor de ciencia ficción, por lo general trato de crear el futuro más plausible que pueda concebir para el cuento o la novela que estoy escribiendo. Porque escribir sobre un futuro en el que la gente utilice fuentes de energía renovables me parece muy plausible. Después de todo, es un poco difícil imaginar la supervivencia de la humanidad en los próximos cien años, sin abandonar la quema de combustibles fósiles en favor del uso de fuentes de energía renovables, el consumismo desenfrenado en favor de prácticas autosostenibles.
5-. JPCP: ¿Qué características nos permiten ver al solarpunk como un movimiento cultural?
GL-R: Como movimiento cultural, el solarpunk aparece asociado al activismo ecológico y ambiental, cuyas características o consignas son:
- descentralización;
- justicia climática;
- democracia directa;
- ecología social;
- economía cooperativa (y no competitiva); y
- unidad en la diversidad.
Los cimientos del movimiento cultural solarpunk fueron sentados en 2014 por el ideólogo Adam Flynn, a través de su Proyecto Hieroglyph. Según Flynn, “los activistas son solarpunks porque las alternativas serían la incredulidad y la desesperación, ya que las promesas de los precursores de la singularidad tecnológica y otros transhumanistas son individualistas e inalcanzables, mientras que las propuestas de los solarpunks apuntan a mejorar la vida de todos hoy y para las generaciones futuras”.
6-. JPCP: Finalmente, ¿cómo se ve el solarpunk en América Latina?
GL-R: Hasta donde yo veo, diría que, al menos como subgénero de la ciencia ficción, el solarpunk es casi invisible o totalmente ausente dentro del cuerpo narrativo de la literatura fantástica producida en América Latina en las dos primeras décadas del siglo XXI. Al parecer, la minúscula semilla plantada por la antología Solarpunk aún no ha germinado como debería. Debemos esperar y luchar para que esta situación cambie en los próximos años.
